03/11/2025
Chihuahua, Chih.- El especialista en materia de seguridad, doctor José Carlos Hernández, advirtió que el asesinato del presidente municipal de Uruapan, Michoacán, Carlos Manso, representa un atentado directo contra el Estado Mexicano y marca un punto de inflexión en la violencia política del país.En entrevista para LosInformantes.mx, el analista sostuvo que el ataque no sólo busca eliminar a una figura política con amplio respaldo social, sino también mandar un mensaje de desafío frontal al gobierno federal. “Es un golpe simbólico al corazón institucional del país”, señaló.
Hernández explicó que este crimen refuerza la aparición de un nuevo tipo de ejecutores conocidos como “sicarios kamikazes”, caracterizados por su disposición a morir en el acto del atentado. “El agresor sabía perfectamente que no iba a salir con vida, y aun así llevó a cabo el ataque. Eso muestra un nivel de adoctrinamiento y fanatismo sin precedentes en México”, apuntó.
De acuerdo con el especialista, este tipo de agresores no actúan bajo el esquema tradicional del crimen organizado, sino bajo una lógica de sacrificio planeado. “Estamos viendo células que ya no buscan la huida, sino la inmolación violenta. Eso cambia por completo el mapa de riesgo para autoridades, policías y funcionarios públicos”, advirtió.
Recordó que el alcalde Manso era una figura con alta aceptación popular, reconocida por impulsar políticas locales de reconstrucción social y combate a la corrupción. Por ello, su asesinato envía una señal de descomposición política y vulnerabilidad de las instituciones.
Hernández enfatizó que, ante un hecho de tal magnitud, corresponde al gobierno federal enviar un mensaje contundente de autoridad. “No contra la ciudadanía, no contra los medios de comunicación, sino contra las estructuras criminales que pretenden suplantar al Estado. De lo contrario, este tipo de actos se normalizarán”, afirmó.
El experto concluyó que el país enfrenta una mutación del crimen político, donde el poder del narcotráfico se expresa no solo con dinero o territorios, sino con actos suicidas de terror. “Lo ocurrido en Uruapan no es un hecho aislado, sino un aviso de lo que puede venir si no se actúa con inteligencia y decisión”, subrayó.
          

